
SER RELIGIOSO
DE SAN JUAN DE DIOS

La Orden Hospitalaria la conformamos Hermanos consagrados a Dios, que seguimos a Jesús, al estilo de nuestro fundador San Juan de Dios. Por ello, vivimos en comunidad y nos dedicamos a Evangelizar desde el carisma de la Hospitalidad, en el ámbito de la salud y poniéndonos al servicio de aquellos que experimentan pobreza, sufrimiento, marginación y otras carencias. Prolongando de esta manera el amor compasivo y misericordioso de Dios, entre los hombres.

Vocación
La vocación es iniciativa y un don recibido de Dios, pero es también una tarea que nos compromete. El Señor nos amó y llamó primero, y nosotros le hemos respondido siguiéndolo. Es por habernos sentido amados por Él, que hemos acogido su invitación anteponiendo a otros intereses que el mundo nos ofrece. Orientamos nuestra vida para desarrollar un proyecto de vida personal y comunitario de seguimiento a Jesús, desde el carisma de la Hospitalidad.
Para nosotros los Religiosos de San Juan de Dios, la Hospitalidad se convierte en una manera concreta de vivir y seguir a Jesús. Ser hospitalarios es todo un estilo de vida que nos impulsa a acoger sin límites a todo ser humano de este mundo marcado por la hostilidad.
San Juan de Dios
De Juan de Dios conservamos pocos escritos, pero en ellos él nos expresa la profundidad y riqueza de su experiencia de Dios. Y nos invita a vivir esta misma experiencia y por ello nos dice: “Si conocieras lo grande que es la misericordia de Dios, nunca dejarías de hacer el bien mientras pudieses”. La grandeza del amor de Dios que lo impregna todo, nos conduce al amor mismo en nuestros hermanos necesitados. Por eso Juan nos llama a “Tener siempre caridad, porque donde hay caridad, hay Dios, aunque Dios en todo lugar está”.


Programa de
acompañamiento vocacional
- Encuentros y entrevistas personales con el Hermano Acompañante.
- Inserción periódica o permanente en la Comunidad asignada para esta experiencia.
- Participación en convivencias vocacionales con otros aspirantes.
- Profundización de la vida cristiana y lectura de los documentos de la Iglesia y de la Orden.
- Compromiso con realidades de pobreza, enfermedad, sufrimiento y exclusión.
Acompañamiento vocacional interno
Esta etapa inicial es un tiempo caracterizado por el mutuo conocimiento entre el candidato y la Orden. Es una experiencia en el que el joven discierne si tiene cualidades para ser religioso. Para ello el candidato se inserta de manera periódica o permanente en una Comunidad nuestra. Es un tiempo para revisar y profundizar en la propia experiencia humana y cristiana, a través del compartir de la historia la historia personal e historia de fe.

PROCESO DE FORMACIÓN DEL HERMANO
DE SAN JUAN DE DIOS
Formación inicial
ASPIRANTADO
ASPIRANTADO
Esta etapa inicial es un tiempo caracterizado por ser un periodo de formación en el que el joven discierne si tiene cualidades para ser un Hermano. Es un tiempo para profundizar en la propia experiencia humana y cristiana, dedicado a conocerse, aceptarse, amarse, convertirse al evangelio y demostrar que hay una identificación con el carisma hospitalario.
POSTULANDO
POSTULANDO
Es un período de dos años, en donde se favorece el crecimiento del postulante en su madurez humana y afectiva, en su vida de fe y oración, en el servicio a los demás, a través de la cercanía a realidades sanitarias y sociales. Esta experiencia la vivirá en comunidad para que pueda descubrir también la riqueza de la vida fraterna. Esta propuesta facilitará que el candidato acompañado por un Hermano descubra su idoneidad a nuestro carisma particular y a la vida consagrada.
NOVICIADO
NOVICIADO
Es una etapa fundamental, los novicios viven la experiencia del encuentro personal con Dios, disciernen, clarifican y profundizan la llamada del Señor, para poder tomar libre y conscientemente, la decisión de seguir a Cristo Buen Samaritano, en la Orden Hospitalaria, en condiciones suficientes de estabilidad y equilibrio espiritual. Es un tiempo donde se evidencian las cualidades humanas y espirituales de los novicios, comprobando su intención para la profesión de los votos religiosos.
ESCOLASTICADO
ESCOLASTICADO
Etapa de formación teológica, profesional y consolidación vocacional, que abarca el tiempo que va desde la primera profesión hasta la profesión solemne. En esta etapa se pretende consolidar la opción vocacional, consiguiendo el grado de madurez que le permita comprender y vivir su consagración en la Orden como un verdadero bien para sí mismo y para los demás: asimilando el carisma con profundo espíritu evangélico.
Formación permanente
Todo religioso hospitalario de Votos Solemnes debe mantenerse actualizado y capacitado para responder a las exigencias de toda Vida y Misión Hospitalaria. Por eso, aunque llegue a su término la formación inicial el Hermano de San Juan de Dios ha de mantenerse siempre disponible a aprender y adquirir nuevos conocimientos.


Etapas de conocimiento
y discernimiento
Primera etapa
Se caracteriza por ser un tiempo de “ver”, donde el joven expresa su interés de conocer lo que hacemos, por lo cual se le invita a que participe de actividades del voluntariado, visitas a alguna comunidad u obra nuestra, retiros juveniles y participación en reuniones informativas del carisma hospitalario.
Segunda etapa
La segunda etapa, partimos de la premisa de que el joven ya manifiesta expresamente su decisión de comenzar un proceso formal de discernimiento a la Vida Religiosa y a la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios. En estos casos, el joven es considerado como Aspirante y se le propone el Programa de Acompañamiento Vocacional.
Conviértete
en religioso
de San Juan de Dios
A todo joven que desea profundizar en su vida cristiana y vocacional le ofrecemos la oportunidad de discernir su inquietud, clarificando con transparencia sus motivaciones internas, contrastando sus cualidades y talentos personales con los valores y exigencias propias de la vida y misión del religioso de San Juan de Dios, para que de esta manera pueda tomar una decisión responsable.